A parte del citado pueblo de heredia, tambien visitamos Etura, Guevara para terminar en Maturana. Se trató de un recorrido suave sin cuestas fuertes pero con grandes atractivos, como por ejemplo los antiquísimos quejigos que pudimos observar en varios lugares, el castillo y el Palacio de Guevara, el cual pudimos visitar y hacernos una idea desde dentro de como fué este edificio del siglo XIV. Otro de los puntos fuertes de esta salida fueron sin duda, los paisajes que se nos ofrecieron. Elguea, Aitzgorri y Altzaina fueron sierras que nos acompañaron en diferentes momentos del recorrido. El merecido almuerzo lo realizamos en Etura, donde Ignacio Arranz, uno de nuestros más fieles senderistas, nos deleitó con un rico membrillo de cosecha propia. Con pena nos montamos en el autobús, ya que el día invitaba a seguir caminado, pero en Maturana dimos por finalizada la salida de este mes.